Tengo que reconocer que este trabajo es sin duda mi favorito del Sr Vince Fournier, en primer lugar por reunir a la mejor formación que quizá haya tenido es toda su historia, acompañado al bajo por el Sr. Kip Winger, a la batería el no menos impresionante Ken Mary, que poco después pasaría a ser miembro fundador de House of Lords, y uno de los platos fuertes, el cachas Kenny Roberts a la guitarra, sin bien hay que reconocer, que pese al gran trabajo que realiza, poco fortuna tuvo posteriormente.El disco de abre de forma magistral con un matador riff en uno de los platos fuertes del disco como es la patriotera “Freedom”, que ya nos marca las pautas de por donde se va a desarrollar el disco, puro heavy/hard rock sin concesiones, en el que sin duda es su trabajo más cañero, ya que sus dos siguientes obras fueron mucho mas vendedoras, especialmente "Trash", pero eran mucho más melódicas, más hair metal, que era lo que predominaba en la época, ya hay que reconocer que Alice Cooper sabe adaptarse a cada momento, si no no llevaría 40 años en el negocio. Al trabajo le siguen Lock me up, a la mas comercial “Give the radio back”, o el impresionante trabajo a la guitarra en la oscura “Step on you” y quizá el temas más flojo del album sea “Not that kind of love”. Pero amigos todavía lo mejor esta por llegar, y sin duda para mi, el mejor tema de este disco en “Princess of darkness” donde se mezcla por igual melodía y rabia, con ese lado un tanto macabro del Sr, Fournier, para continuar con otro trallazo heavy como es “Time to kill”. Con “Chop, chop,chop” se abre una historia de un psicópata, que continua con la acustica “Gail”, quizá la única reminiscencia a su sonido setentero, para finalizar con la frenética “Rose on white lace”, otro de los puntos fuertes y que cuando finaliza te dan ganas de volver a deleitarse con tan soberbio trabajo.
Sin duda el mejor disco de su carrera, en mi modesta opinión, acompañado por una super banda, con un producción increíble, donde todos los músicos se lucen, impresionante sonido de batería y bajo, y el sonido tan característico de la guitarra de Roberts, hace que todo suene a las mil maravillas, y además con unos temas perfectamente interpretados por Alice Cooper, no cabe otro resultado que un trabajo redondo.
Frodcatley
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