Trece años han pasado desde el ultimo trabajo de esta infravalorada banda, liderada por Dave Meniketti, y donde aun permanece el bajista Phil Kennemoore, que está pasando una complicada situación al detectarle un cáncer y parece que bastante avanzado.
A decir verdad, el resultado es mas que aceptable, digno de nombre que arrastran, si bien como digo, no han tenido la suerte que se han merecido, pero como por desgracia ocurre en multiples ocasiones, no son los únicos.
Tras un breve intro, “On with the show” nos muestra un hard rock marca de la casa, con poderosos riffs y un tema muy directo, aunque hay que decir que en la voz de Meniketti, si se nota el paso del tiempo. Mas pausada “One life”, con un bonito solo de Meniketti, que la verdad que sin ser un virtuoso, sabe imprimir gran felling a su instrumento, dando continuidad a un tema de similar características en “Shine On”, quizá con un estribillo más coreable. “I want you money” vuelve a sonar puro hard, sin ser un tema espectacular, quizá por sonar demasiado manido, si es efectivo, y es que la verdad, que a estas alturas Y&T no pretende descubrir la pólvora, pero dentro de su forma de entender el rock, y tras muchos años de carrera, seguir ofreciendo temas cuando menos entretenidos. “I´m coming home”, es 100 % reconocible Y&T, con un riff inicial que nos recuerda a “Forever”, y que ha sido elegido como single, y la verdad, que encajaría dentro de la MTV si se este trabajo se hubiese editado a finales de los 80, rockero y comercial a la vez. Muy buen trabajo a la voz para la balada “If you want me”, que cumple con su papel, y destaca el solo con emoción contenida. La acedeciana “Hot shot” ya lo dice todo, parece creada por el mismísimo Young, incluso parece que Dave pretende en algún momento emular a Brian Johsnson. Riff heavy total para el tema mas cañero y acelerado del disco “How long”. Mas blusera, con un bajo muy presente, uno de los temas que mas me han gustado, “Gonna go blind”, con un toque a Zeppelin. “Don´t bring me down” parece ser dos canciones en una, una primera que no me termina de enganchar, con la parte del estribillo algo mas acertada, aun así creo que es el tema más flojo del disco. El último corte “Blind patriot” vuelve a subir el listón y es uno de los mas destacados del mismo, siendo un broche perfecto para terminar para tener la sensación de haber disfrutado de un muy buen disco.
Como digo, trabajo notable, bien producido y que no desmerece el nombre de la banda, que nos ofrece un hard rock sin pretensiones, pero muy bien elaborado, con un toque ochentero, pero sin sonar añejo, por lo que no dudéis en darle una oportunidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario